En número grandes, la cantidad total de capital invertido en empresas europeas en 2021 aumentó un 51% interanual hasta 138.000 millones de euros. Este nivel supera con creces los niveles registrados en cualquier año. Se invirtió en 8.895 empresas, un 13% más que la media de los cinco años anteriores, de las cuales 84% eran PYMES.
Las inversiones en adquisiciones aumentaron un 8% en relación con el año anterior, hasta alcanzar los 65.000 millones de euros.
La compra de participaciones en el mercado incrementó en un 28% hasta los 79.000 millones de euros. De este valor el mercado medio representó el 36%. Por sectores, los bienes de consumo y servicios recibieron la mayor inversión en compras de empresas (20.000 millones de euros), seguido por las TIC (16.000 millones de euros).
La inversión en capital riesgo alcanzó los 22.000 millones de euros en 2021, con un crecimiento del 70% desde 2020. En 2021 hubo inversión de capital riesgo en 5.334 compañías, respaldando así alrededor del 60% del total de empresas en las que se invirtió. Las inversiones tardías (tras la fase de start-up) alcanzaron un aumento del 170% desde 2020. Por sectores, las TIC son fundamentales, representando la mitad de la inversión de capital riesgo.
En España, tras la crisis de liquidez generada por el COVID, muchos inversores han visto oportunidades de inversión en sectores en reactivación, como el turismo y la hostelería. Además, ha habido una creciente inversión en el sector de las TIC y la biotecnología y la sanidad. Esta ola de inversiones no ha discriminado entre PYMES y grandes empresas. Así, las oportunidades de inversión pueden presentarse no solo en el segmento de las grandes y medianas operaciones, sino en operaciones pequeñas con un valor inferior a los 5 millones.
El mercado de las pequeñas operaciones permite canalizar excedentes de liquidez de inversores menos habituales en operación de adquisición de empresas como grupos familiares, empresas de mediano e inversores individuales, pero también da paso a que empresas experimentadas en la ejecución de operaciones de M&A puedan realizar operaciones pequeñas estratégicamente seleccionadas y en las condiciones de ventaja que ofrece un mercado de compradores.